Quizás
23 de julio de 2003
Creía que no existía salida al abismo de mis sueños,
me hallaba sumergida en el llanto amargo de la soledad y el desespero.
Allí, oculta en aquel rincón donde no llega la vida y donde el tiempo consume lo que queda de uno.
Y suponía que jamás me encontraría con mi alma de nuevo.
Hasta que me perdí en tu mirada profunda y espesa, entre tus ojos repletos de historias que aún no conozco.
No se quién eres, ni cómo eres, ni de dónde vienes, y juro que no me importa.
Quizás no seas quien espero, eso aún no puedo saberlo, pero no existe miedo de aventurarme hacia tu cuerpo, de penetrar en tu alma y de vivir y quedarme en tus ojos; esos ojos inmensos que me devuelven lo que era.
Quizás mañana muera de nuevo por tí, pero quiero vivir el hoy, quiero descubrir quien eres y que tú descubras quien soy para que juntos le demos sentido a las a las siluetas que se representamos en el cuadro de la vida.
Nota: Dibujo realizado por José Ángel Hernández, 10 años. (Mi hermano)
me hallaba sumergida en el llanto amargo de la soledad y el desespero.
Allí, oculta en aquel rincón donde no llega la vida y donde el tiempo consume lo que queda de uno.
Y suponía que jamás me encontraría con mi alma de nuevo.
Hasta que me perdí en tu mirada profunda y espesa, entre tus ojos repletos de historias que aún no conozco.
No se quién eres, ni cómo eres, ni de dónde vienes, y juro que no me importa.
Quizás no seas quien espero, eso aún no puedo saberlo, pero no existe miedo de aventurarme hacia tu cuerpo, de penetrar en tu alma y de vivir y quedarme en tus ojos; esos ojos inmensos que me devuelven lo que era.
Quizás mañana muera de nuevo por tí, pero quiero vivir el hoy, quiero descubrir quien eres y que tú descubras quien soy para que juntos le demos sentido a las a las siluetas que se representamos en el cuadro de la vida.
Nota: Dibujo realizado por José Ángel Hernández, 10 años. (Mi hermano)
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